I am. es el séptimo episodio de Lovecraft Country. Tal como nos tiene acostumbrados, la serie nos presenta un capítulo en el que nada parece tener sentido aunque finalmente todo lo tenga.
Hippolyta, viuda de George Freeman, fue la encargada de llevar adelante la trama atravesando por situaciones inesperadas e insólitas hasta para este programa. A lo largo de su recorrido, también fiel a su costumbre, Lovecraft Country aprovechó para referenciar a varios personajes y acontecimientos importantes de la época.
Aquí vamos a compartir las referencias más importantes de I am.
Josephine Baker
La reconocida vedette norteamericana se convirtió en una de las personalidades afroamericanas más conocidas de su época. Si bien tuvo una corta carrera en su país natal, el éxito golpeó a su puerta luego de subir a un barco que la condujo a Francia.
Un funcionario norteamericano y su esposa habían descubierto el talento de Josephine Baker en un salón de baile y la invitaron a viajar con ellos a París para encabezar su propio show: La Revue Nègre. Este es el show en el que vemos a Hippolyta descubriendo sus talentos para el charleston.
Josephine Baker se convirtió en un auténtico fenómeno que la llevó al estrellato de manera inmediata. Su gracia para moverse, la grandilocuencia del show que incluía una banda de jazz en vivo y la diminuta ropa con la que las bailarinas subían al escenario, despertó una gran pasión en la París de los años ’20.
Su fama, su simpatía y su personalidad, le abrieron puertas que supo utilizar para fines nobles.
Josephine, la espía
Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, Josephine Baker se encontraba triunfando en Francia, país al que consideraba propio. En consecuencia, decidió que no podía quedarse de brazos cruzados.
Aprovechó sus influencias para operar como espía para la resistencia francesa. Su fama y las pasiones que despertaba en los hombres, le abrieron la puerta de varios despachos enemigos de los que supo extraer información utilizando sus encantos. Los datos que recopilaba (planes y posiciones enemigas) eran trasladados en las partituras de sus músicos o en su ropa interior.
Su labor durante la guerra la hizo merecedora de la Medalla de la Resistencia y de la Legión de Honor. Al morir, tuvo un funeral con honores militares.
Josephine, la activista
[embedyt] https://www.youtube.com/watch?v=9pv0QhEyS5c[/embedyt]Una vez retirada de los escenarios, Josephine Baker regresó por algún tiempo a su tierra natal en donde utilizó su influencia para apoyar la lucha por los derechos civiles para las personas de raza negra.
En 1963 Martin Luther King se dirigió al público en una marcha pacífica realizada en Washington. Allí, pronunció una frase que quedó en la memoria de la humanidad: “I have a dream”. En esa misma marcha, una mujer tuvo el placer y la responsabilidad de ser la única oradora femenina en dirigirse al público. ¿Ya adivinaron quién? Por supuesto, Josephine Baker.
Frida Khalo en Lovecraft Country
La reconocida artista mexicana tuvo un cameo que pasó desapercibido en el último episodio de Lovecraft Country. Justamente cuando Hippolyta ya se ha convertido en una de las chicas de Josephine Baker, vemos a Frida saludando a las bailarinas sobre una escalera.
Ambas mujeres se conocieron en París y tuvieron una relación amorosa que desafiaba todas las barreras de la época. Josephine era una de las mujeres afroamericanas más exitosas del mundo. Frida, por su parte, acababa de convertirse en la primera mujer en venderle una obra al Louvre.
Una relación de dos artistas reconocidas y exitosas, que no tuvieron reparos en mostrarse juntas.
Una motoquera de color
A bordo de Woody, Hippolyta se dispone a obtener las respuestas que nadie quiere brindarle sobre la muerte de su marido. En la ruta, se cruza con una motociclista con quien se saluda afectivamente.
Si bien al personaje no se le asigna ningún nombre, es una clara referencia a Bessie Stringfield, la primera mujer motociclista negra en recorrer las rutas de los Estados Unidos en solitario. Es posible que la escena de Lovecraft Country sea una referencia a uno de los tantos recorridos de Bessie por su país.
Esta mujer, pionera por partida triple, no solo fue la primera mujer negra que, en solitario, se dedicó a recorrer las rutas, sino que también sirvió como mensajera civil para el ejército de los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial.
Fue fundadora del Club de Motocicletas Iron Horse y en el año 2000, siete años después de su muerte, se creó el ‘Bessie Stringfield Memorial Award’ con el que se reconoce a los motociclistas que obtienen logros excepcionales.
Afrofuturismo junto a Sun Ra
Tal vez sea la secuencia más loca de toda la serie sea esa en la que Hippolyta, vestida como Orithia Blue, descubre un extraño planeta junto a George Freeman.
Allí escuchamos unas extrañas palabras que no provienen del guión de la serie sino de un prodigioso y particular músico afroamericano conocido como Sun Ra.
Sun Ra es uno de los precursores del Jazz experimental que también, por supuesto, fue un importante defensor por la igualdad de los derechos civiles de las personas de color.
Sun Ra se consideraba a sí mismo oriundo de “otra realidad”. Esta filosofía le permitía posicionarse en un punto en el que no existía margen de discusión para su planteos. Utilizando argumentos mitológicos y cósmicos, se limitaba a describir la opresión de su raza sin confrontar pero también sin considerarse pacifista. Simplemente, lo hacía desde un sitio en el que podía observar la realidad de manera objetiva.
En 1974 se estrenó la película Space Is the Place, un film de ciencia ficción afrofuturista en el que Sun Ra tiene una importante participación. Allí, una mujer le pregunta “¿Cómo sabemos que no eres solo un viejo hippie?”, a lo que el músico responde con las mismas palabras que escuchamos en este episodio de Lovecraft Country:
[embedyt] https://www.youtube.com/watch?v=bCalqwsicls[/embedyt]“No soy real. Solo soy como tú.
Tú no existes en esta sociedad.
Si existieras, tu gente no exigiría igualdad de derechos.
No eres real.
Si lo fueras, tendrías cierto estatus entre los países del mundo.
Así que ambos erraremos.
No vengo a ti como una realidad.
Vengo a ti como un mito.
Porque eso es lo que somos los negros.
Un mito.
Sentí curiosidad.
Ahora que te has identificado, podremos integrarte en nuestra sociedad.
No necesitarás los dispositivos en las muñecas.”
Una semana más en la que Territorio Lovecraft nos expone a una mezcla de géneros, narrativas y realidades que, además de disfrutar durante una hora, nos propone conocer algunos detalles sobre la cultura y personalidades norteamericanas de las que no es habitual escuchar hablar.
Veremos la próxima semana, cuando se estrene un nuevo episodio de la serie, a qué artistas les toca ser homenajeados.
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